domingo, 9 de mayo de 2010

Dia 1.Viaje de Madrid a Hiroshima y visita a la ciudad.8 y 9 de mayo de 2010.

Tras un par de días preparando las cajas en las que llevaría las bicis y las alforjas con el resto del equipaje, por fin a las 04:30h sonó el despertador y me vestí para tras un desayuno breve ir a la estación de autobuses donde cogía a las 06:00h el bus que me llevaría al aeropuerto de Madrid-Barajas.
En la estación deje a Lore con mi "shinkansen" y el resto de mis cosas, mientras me dirigía a buscar a mi compañero de viaje. En el transcurso de este recorrido recibo una llamada de Lore en la que me dice que hay que coger el bus en el interior de la estación que abre a las 05:30, asi que al llegar nos dirigimos hacia el anden donde estaba el autobús esperando. Cargue la bici y el resto de mi equipaje en el autobús y tras despedirme de Lore partí hacia Madrid.
Una vez en Madrid el autobús nos dejaba en la T4 y el avión salía de la T1 así que me tocó coger el autobús interno que circula en el aeropuerto y una vez en la T1 cogimos un carrito en el que cargamos las bicis y las alforjas y nos dirigimos en busca de nuestro terminal de facturación. Allí nos atendió una chica muy simpatica a la que estuvimos camelando un rato para convencerla de que las dos bicis pesaban mas o menos lo mismo y asi sólo pesara una de ellas ya que en la otra llevabamos un ligero sobrepeso de 7 kilos que nos haría pagar cerca de 300€ adicionales.
Y efectivamente, la debimos de camelar bien, ya que sólo peso la bici más ligerita que eran unos 20,5 kg y le dijimos "¿Bajamos la otra bici para pesarla?, porque mas o menos pesaran lo mismo" y nos dijo que no era necesario con lo que nos libramos del exceso de equipaje ya que en la caja que no pesaron llevabamos mi "shinkansen", 2 alforjas, herramienta y algunas cosas mas, unos 27 kilos.
Ua vez facturado el equipaje nos llevaron a un lugar donde embarcan la mercancia mas voluminosa, ya que las cajas no entraban en las cintas del aeropuerto, y allí nos despedimos de nuestras queridas bicis, con la esperanza de verlas pronto en Hiroshima y de una pieza, o mejor dicho, de varias piezas ya que iban desmontadas, pero todas enteras. Desde aquí nos dirigimos al control de seguridad, donde pasamos sin problemas, salvo que a mi compañero le hicieron acabarse la botella de agua que llevaba. Una vez pasado el control nos dirigimos a la puerta de embarque para ver donde cogiamos el avion y nos sentamos por allí a comer un bocata y una chocolatina entre los dos hasta que se acercara la hora de poder embarcar.


Y por fin llego la hora de embarcar, y se iba haciendo la cola con todo el pasaje. Y por fin, a las 11:15h nos comunican que no se puede embarcar aún y que el vuelo saldrá con retraso debido a la nube de cenizas volcanicas procedentes de Islandia y que en media hora nos darán novedades. Así a las 11:45h nos comunicaros que ya se podía embarcar y finalmente partimos de Madrid a las 12:30 con un retraso de 1 horita, pero que creemo que se puede recuperar durante el viaje ya que nos varían la ruta de la habitual del vuelo y pasamos sobre sagunto, Mallorca, subimos hacia Zurich y los Alpes suizos, para continuar por Munich, Praga, Varsovia, atravesar toda Siberia y finalmente llegar a Beijing (Pekín), aunque sin recuperar el retraso acumulado.
En el vuelo, a nestro lado se sentaron dos japonesas que venían de vacaciones de Andalucía y con las que entablamos conversación e intentamos que nos acogieran en Osaka, ya que vivían por allí. poco a poco descubrimos que se llamaban Yoko y Maloe y estuvimos conversando todo el viaje con ellas, hasta el punto de que nos intercambiamos los correos y quedamos con ellas el jueves para tomarnos un café en Osaka o por alli cerca y con un poco de suerte, intentariamos nuevamente que nos alojaran.
La comida en el avión no es que fuera una maravilla, pero se dejaba comer y degustamos arroz con carne de cerdo, bolitas de merluza y berengena frita, una mini-ensalada de zanahoria, maiz y lechuga, un pan de leche con mantequilla y de postre un pastelito de chocolate que no estaba del todo mal y todo ello acompañado de una cervecita china que estaba bastante buena.
Una vez en el aeropuerto de Beijing, nos pusimos en la fila de los transitos y cuando ya nos tocaba un policía nos dijo que teníamos que ir a otra fila, a la de vuelos domesticos, y hacia allí nos dirigimos y como no estabamos seguros de que fila era nos colocamos cada uno en una. Al final me toco el turno y pase el control sin ningún tipo de problema, pero mi compañero que se puso en la misma fila que yo al ver que era correcta, como tenía el pasaporte antiguo casi se tiene que quedar áquí. Yo iba un poco por delante informandome de donde teniamos que ir a coger el avión, bajamos unas escaleras mecanicas que nos llevaban a un andén en el que cogíamos un tren monorail sin conductor alguno, aunque si con un controlador, que nos llevaba a la terminal T3-C donde cogeríamos el nuevo avión hacia Hiroshima. Al final entre pitos y flautas, casi perdemos el vuelo, puesto que llegamos a la puerta de embarque apenas con un par de minutos de tiempo antes del cierre del mismo. Aqui nos subieron a un autobús que nos llevaría hasta la puerta del avión, comprobando en ese instante y con nuestros propios ojos como eran embarcadas nuestras bicicletas y viendo como les daban un trato excelente.
Apenas depegó el avión caí rendido de sueño despertando justo antes de aterrizar en Dalian, tambien en China, donde desembarcaríamos del avion para esperar en la terminal unos 20 minutos esperando a otro vuelo que se fusionaba con el nuestro y aprovechamos para dar buena cuenta de unos sandwiches que nos habían dado en el avión. Antes de esperar en la terminal debimos pasar un nuevo control de pasaportes y de seguridad, pese a no salir del aeropuerto ni del pais y aqui una toallita humeda que me habían dado en el avión y llevaba en el bolsillo pito al pasar por el arco de seguridad, lo que hizo que me cachearan de arriba abajo, y eso que no habia salido del aeropuerto y en el otro aeropuerto había pasado el control sin incidencias. Finalmente, volvimos a embarcar en el mismo avión que habíamos dejado hacia un rato y finalmente despegamos con destino Hiroshima.
Y por fin llegamos al aeropuerto de Hiroshima, a las 06:30h hora española, pero que eran las 13:30h en Japon tras 24 horas de viaje desde la salida de Valladolid. Una vez en tierra y tras pasar el control de pasportes le pregunte a una señorita del aeropuerto si nos daban las bicis por la cinta de equipajes o por otro lado, a lo que mientras iba a preguntarlo, aparecieron de repente las bicis por una puerta cargadas cada una por dos operarios que las trataban como si fueran cuadros de lujo que se pudieran romper con la mirada, quedandonos alucinados pues habíamos oido de todo sobre el trato que se da a los equipajes.
Después de esto nos tacaba pasar el control de aduanas, donde nos pasaron las cajas por el escaner para ver su contenido y a continuación procedieron a cachearnos, a mi una chica y a mi compañero un chico, con lo cual era la segunda vez en menos de 4 horas que una chica me cacheaba casi metiendome mano, porque el cacheo era bastante intensivo, y te tocaban por todas partes menos el paquete.
Una vez que pasamos todos los controles, y ahora si, estabamos en Japón, nos dimos cuenta que era domingo y los bancos estaban cerrados, asi que no podíamos cambiar nuestros euros por yenes, asi que era como no tener dinero.
Tras intentar bajar en las limusinas del aeropuerto(asi se llaman los autobuses que van del aeropuerto a la ciudad) sin pagar previa consulta a los conductores, uno de ellos nos dijo que intentaramos cambiar en el hotel que había en el aeropuerto y hacia alli me dirijí para cambiar 50€ (5396 Yens) para ir tirando el primer dia, ya que creíamos que el hotel sería más caro.


Mientras esperabamos a la limusina aproveche para echarme una cabezadita en el mismo suelo del aeropuerto, cosas del yet lag, y una vez en el autobus, los 45 minutos del viaje tambien los hice k.o.
Al llegar a la estación de autobuses bajamos el equipaje y montamos las bicis en apenas 30 minutos las dos y buscamos donde dejar las cajas, dejandoselas a un señor en la estación con pocas esperanzas de encontrarlas a nuestro regreso y nos dispusimos a dar una vuelta por la ciudad.
Nada mas salir de la estación vimos el Castillo de Hiroshima


junto con la Torre del Castillo y nos dirigimos a ver el parque Shukkeien, pero estaba cerrado, y de aqui fuimos a ver el edifico en el que estalló la bomba atomica

y la visión del mismo es impactante, tambien vimos el Parque de la Paz. Luego nos dispusimos a cenar un plato precocinado en un "seven-eleven" y a buscar un lugar donde poder pasar la noche sin gastarnos ni un duro. Tras intentar hacerlo en la recepción de algunos hoteles sin exito y no atrevernos a hacerlo en el Parque de la Paz por haber ya gente durmiendo, finalmente acabamos pasando la noche en dos bancos que había en la puerta de un hospital, hasta que se levanto un aire que nos estaba dejando helados y nos trasladamos a la acera de enfrente, junto a la pared el hospital donde no nos daba el aire. Apenas pegamos ojo en toda la noche, dormiamos a ratos y poco tiempo cada vez, debido unas veces al aire, otras al paso de gente y/o coches y otra más debido a la única ambulancia que llegó al hospital en toda la noche y que nos resultó curioso que por megafonía desde la ambulancia iban anunciando, o eso creemos, lo que le pasaba al paciente.
Hoy haríamos unos 11 kilometros por la ciudad pero olvide poner a cero el cuentakilometros, asi que no tengo datos de la etapa.

2 comentarios:

  1. Hola! Nosotros también viajaremos por Japón en bici este verano. Esperemos que el primer día no sea tan duro como el vuestro! Nosotros tiramos de Couchsurfing, llegamos a Osaka y nos acoge una mujer que vive con 4 gatos, ideal para descansar, ja,ja!

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  2. Espero que se os de muy bien.
    Si necesitáis cualquier aclaración o cualquier duda, no dudéis en preguntar.
    Un saludo

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