Hoy hemos madrugado para ir a visitar Nagoya antes de salir hacia nuestro siguiente destino.
Hemos viajado en tren hasta a estación donde esta nuestras bicis aparcadas, nos ha tenido que acompañar a la ciudad el hijo de nuestra anfitriona para ayudarnos a sacar las bicis del parking, porque no sabemos como funciona, y aunque él tampoco sabe, con ayuda de la operadora finalmente las liberamos del parking.
Lo mas curioso es que cualquiera que hubiera querido echaba el importe que se adeudaba en el parking que eran 200 yens(unos 2-3 euros) y se habría podido llevar tranquilamente las bicicletas a su casa. Menos mal que estamos en Japón y la deli
ncuencia brilla por su ausencia.
Una vez en la ciudad, hemos visitado el castillo de Nagoya, llevandonos una sorpresa, ya que estan celebrando el 400 aniversario de la fundación de Nagoya como ciudad y nos han obsequiado con unas pegatinas conmemorativas del evento.
El interior del castillo es una maravilla y
estan haciendole una ampliacion que permiten visitar , eso si con
el preceptivo casco de seguridad.
A la salida del castillo, nos estaba esperando nuestra insaciable amiga la lluvia que nos acompañaría hoy durante todo el día.
Saliendo de Nagoya visitamos el templo
Osu Kannon y posteriormente en tramos en una zona comercial cubierta, tipo calle de tiendas, pero con techo y posteriormente nos dirigimos al templo Eikokuyi, para finalmente detenernos a comer, puesto que ya son las 13:30 y aun
seguimos en Nagoya.
Tras reponer fuerzas y a toda velocidad bajo un tremendo diluvio, cuando llevabamos apenas 10 kilómetros recorridos ecidimos en un semáforo preguntar a un camioneto si nos podía acercar un poco hasta Toyohashi, preguntamos a un par de ellos mas y finalmente uno accedio a llevarnos un tramo de unos 25 kilómetros que agradecimos, ya que por lo me
nos estuvimos resguardados de la lluvia.
Pero aun nos quedaban por recorrer otros 25 kilómetros, que decidimos hacerlos sobre las bicis a toda velocidad, por encima de 20 km/h continuamente, hasta que por fin llegamos a Toyohashi y mientras ibamos hacia la estacion vimos un hotel de la cadena Toyoco-Inn en el que cogimos una habitacion doble por 8190 ¥ y que era una pasada, asi que si alguna vez necesitais hotel en Japón recordar Toyoko-Inn.
Una vez en la habitación y con la calefacción a tope para secar la ropa que estaba tendida por todas partes, salimos a cenar con un par de paraguas prestados por el hotel.
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